Hay muchas plantas herbáceas perennes con flor, pero no todas son tan populares como la alcea o malva real. Esta bella planta originaria de China produce unos tallos florales muy, muy largos teniendo en cuenta el tipo de planta que es: de ni más ni menos que de 1,5 o 2 metros. ¿Te imaginas tenerla en tu jardín o, incluso en tu terraza en una amplia maceta.

El nombre científico de esta planta es Althaea rosea, aunque es mucho más conocida por sus otros nombres, como malva real, alcea, malvarrosa o malva loca. Pertenece a la familia botánica Malvaceae. Crece hasta una altura de 3 metros, con tallos erectos y pilosos. Sus hojas tienen forma acorazonada, con 5 a 7 lóbulos, de color verde.

Las flores brotan durante el verano agrupadas en inflorescencias en forma de espiga, de color rojo, púrpura, blanco, amarillo, rosa o negro-púrpura. El fruto mide unos 2cm de diámetro que, al madurar, se abre dejando caer las semillas.

La malva real o alcea es muy agradecida, tanto es así que puede crecer en todo tipo de suelos. Pero como todas las plantas, ella también tiene sus preferencias. Veamos cuáles son:

Ubicación

Se debe de colocar en una zona donde esté expuesta a la luz del sol directamente, a ser posible durante todo el día.

Riego

El riego debe de ser frecuente, especialmente en verano. Pero hay que evitar dejar encharcado el sustrato o la tierra, por ello, es aconsejable comprobar la humedad antes de regar. Si no sabes cómo, aquí tienes un truco que te será muy útil: introduce un palo delgado de madera (de los que dan en los restaurantes japoneses) en la maceta o en el suelo del jardín, hasta donde puedas, y extráelo con cuidado. Si al sacarlo ves que está prácticamente limpio, es porque la tierra está seca y, por lo tanto, necesita agua; por el contrario, si sale con mucha tierra adherida, significa que está húmeda y se puede esperar un poco antes de regar.